En días pasados, salió la publicación del libro “Tras las huellas de una profesión: La interpretación de conferencias en México, memoria histórica”, cuya presentación fue el pasado 20 de junio. Es la primera vez que existe un documento que dé un contexto histórico para la profesión del intérprete en México.
Lo interesante de este libro, es que nos lleva desde tiempos antiguos hasta los modernos, principalmente en México, en un esfuerzo sin precedentes en nuestro país.
Para aquellos de nuestros lectores que no están dentro del medio de la interpretación que, es importante compartir que, a diferencia de otras actividades profesionales, no contaba en nuestro país con un libro que nos llevase a lo largo de su desarrollo, desde un oficio hasta una profesión que, en la actualidad, cuenta con formación académica desde técnica hasta posgrado (no existía hasta hace algunos años en que surgieron los primeros programas de maestría para la profesión en México).
Datos relevantes sobre la interpretación
No es menester de este blog llevarles por todo el recorrido de la historia, pero quiero compartir unos cuantos datos interesantes sobre esta profesión, que quizás usted, nuestro lector, ignore:
- Antes de Cortés, Francisco Hernández de Córdoba y Juan de Grijalva capturaron nativos en nuestras tierras para enseñarles el castellano y que pudieran servirles como intérpretes.
- La india que muchos conocen como Malinche, se llamaba Malinalli. El nombre Malinche lo dieron los nativos a Cortés, pues iba acompañado de Malinalli.
- El Colegio de la Santa Cruz fue fundado en Tlatltelolco por fray Juan de Zumárraga exclusivamente para la educación de jóvenes indígenas de la nobleza. Se les enseñaba castellano y se buscaba contar con sacerdotes locales para simbolizar la aceptación de la cultura traída por los españoles y facilitar la evangelización.
- Los tribunales coloniales fueron uno de los entornos de mayor desarrollo de intérpretes durante la colonia, puesto que se requerían intermediarios lingüísticos para “asegurar que el indígena tuviera acceso a la justicia”. Muchos trabajaban honestamente, pero otros, cobraban cantidades altas a los indígenas por ayudarles a comunicarse.
- En los tribunales de la Nueva España, los indígenas que no hablaban castellano podrían presentarse ante el juez con un “cristiano amigo” para ayudarles a traducir sus quejas y peticiones.
- Durante su recorrido por nuestro continente, Alexander von Humboldt, llevaba nativos que se desempeñaban como cargadores, guías e intérpretes.
Consideraciones a propósito de la labor del intérprete
Cuando pensamos en intérpretes, solemos imaginarnos a los que están en los congresos dentro de una cabina, sin embargo, muchos han sido los que han estado en contextos “menos controlados”, como los que sirvieron de intermediarios durante la Conferencia de Paz de París, o apoyando a los “principales”, como sucedió con Hitler o Stalin, durante la Segunda Guerra Mundial, o los que interpretaron los Procesos de Nueremberg, después de la guerra. Pero, ¿sabía usted que?:
- La primera vez que se usa el término “intérprete de conferencias” para un intérprete, fue durante la Conferencia de Paz de París en 1919.
- En 1928, durante un curso de la OIT, fue la primera vez que se utilizó el equipo para interpretación simultánea.
- La primera vez que se usó la interpretación simultánea directo de la voz del orador, fue durante los Procesos de Nuremberg.
Aportes del libro
“Tras las huellas de una profesión”
Durante mucho tiempo, fue común que los empleados de embajadas, secretarios de funcionarios o los mismos embajadores fungieran como intérpretes. Todavía hoy, uno de los enormes retos de nuestra profesión, es el uso de profesionales bilingües o plurilingües para realizar el trabajo del intérprete. En particular, las épocas de dificultades económicas hacen que mucha gente con conocimientos de lenguas extranjeras salga al mercado laboral y traten de echar mano de lo que tengan, incluyendo su conocimiento de lenguas, para subsistir.
Ciertamente, esas personas tratan de ganarse el sustento, lo cual no es para nada criticable. Lo que es cuestionable es que, todavía hoy, muchos contratantes prefieren ahorrar contratando a esas personas, cosa que obviamente no sucedería con otras profesiones, como las del contador o el abogado (¿Quién contrata a alguien que sabe de leyes como su abogado durante vacas flacas, o quién pone su relación con la autoridad hacendaria en manos de alguien que creció entre contadores?)
Interpretación en el México moderno
En fin, puesto que lo que nos ocupa en esta edición es el libro “Tras las huellas de una profesión: La interpretación de conferencias en México, memoria histórica”, comparto para terminar, unos cuantos datos de la era moderna de la interpretación en México:
- En los sesenta, el énfasis en la salud abrió las puertas a la interpretación en el ámbito médico; apenas se contaba con un puñado de intérpretes con incipiente formación profesional.
- Las Olimpiadas de 1968 marcaron un parteaguas en la historia de la interpretación en México.
- Las crisis económicas golpean a la interpretación: los efectos de las administraciones de Luis Echeverría y José López Portillo son ejemplos de eso.
- Durante la década de los ochenta, con el foco en el desarrollo petrolero de José López Portillo, la interpretación en ese ámbito tuvo un gran impulso, tanto en oficinas como en el campo (incluyendo las plataformas petroleras).
- El sismo de 1985 abrió un espacio para la solidaridad del profesional intérprete al servicio de los que más lo necesitaban, sirviendo como punto de contacto con expertos extranjeros que llegaron a ayudarnos.
- La firma del TLC con Carlos Salinas de Gortari, abrió muchas fuentes de empleo para los intérpretes.
- Los 2000 han traído altas y bajas para la profesión del intérprete, sin embargo, una de las áreas de enfoque en la actualidad, es la de interpretación en lenguas indígenas y en lengua de señas, gracias al esfuerzo de inclusión de nuestra sociedad moderna.
La recolección de información para este libro, fue realizada con rigor histórico, pero un elemento interesante del mismo, es la mezcla de fuentes documentales y de memoria oral que han dado lugar a los datos y hechos del mismo.
Como miembros del gremio de la interpretación, estamos muy orgullosos de contar con un acervo de la profesión que habla, pero también, a quien no es intérprete, porque nos lleva del México precolonial hasta el México moderno de la mano de una profesión de la cual estamos orgullosos.
El libro puede adquirirse en línea y en distintos puntos de venta. Le editorial es Tirant Humanidades México y, la distribución del libro, corre a cuenta de Tirant Lo Blanch México.
¡Enhorabuena!